SACAR A LAS CHICAS DEL PODIO, O DE LA SUSODICHA FOTO
CON EL GANADOR, SERÍA
POSITIVO PARA LA SOCIEDAD EN GENERAL, Y POR SUPUESTO PARA
EL DEPORTE
Esta semana se dio a conocer el itinerario de la Vuelta
Ciclista a España 2017. Algo más lejos, en Australia, el Tour Down
Under abrió el telón del calendario del UCI World Tour con una singular medida: se acabaron las azafatas en
el podio.
La polémica está servida, ya lo pueden imaginar. Una
de las escenas habituales en nuestra Vuelta es la de las chicas que besan las
mejillas del ciclista ganador. Escena que en las etapas de Australia del Sur ya
se han encargado de prohibir, así como en las carreras automovilísticas. En el
Tour Down Under, son ciclistas infantiles quienes reemplazan a las
azafatas.
Creo que es algo que podría imitarse aquí. Los
organizadores de la Vuelta podrían aplicarse el cuento: aunque la prueba no
comienza hasta agosto, su presentación esta semana podría haber servido para
anunciar alguna medida similar. Porque además de tratar el problema de sexismo,
de tratar a la mujer como objeto, es el deporte un ámbito de promoción de
valores, para la sociedad y para el propio deporte. Disciplinas como el
ciclismo femenino han tenido que sortear muchos obstáculos para que sus pruebas
ganen un mínimo de reconocimiento oficial. Y poco ayuda el hecho de que un par
de chicas posen con los ganadores. Y para el deporte femenino, cualquier ayuda
es poca.
El ciclismo femenino han tenido que sortear obstáculos para que sus pruebas ganen reconocimiento |
En España, ciclistas españoles apenas han comentado el
tema, con opiniones dispares. ¿Veremos un
cambio en nuestra Vuelta? Desafortunadamente, no apostaría por ello a
corto plazo. Al menos en España, las azafatas ‘hacen’ de azafatas,
por lo que su función no se limita a entregar un ramo de flores y dar un par de
besos al ganador de la etapa. Atienden a aficionados y periodistas; se ocupan
de promoción en casetas o stands. Además, no deja de ser una opción más para
cientos de chicas que quieren hacer carrera como modelos.
En cualquier caso, espero que la cuestión
sirva como mínimo para reflexionar en el deporte femenino, y en algo
más extenso, como el trato que se da a las mujeres en el deporte.
Carlos Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario